Tomemos un minuto para hablar sobre su medicamento.  

Este medicamento es Reyataz. 

Debe tomarlo según las indicaciones del médico. Debe tomarlo con comida para que actúe mejor y debe tragar cada cápsula entera.  

Reyataz puede ayudarle a mantener su infección del VIH (virus de la inmunodeficiencia humana) bajo control para que se sienta mejor y viva más tiempo. Siempre debe usarse junto con otros medicamentos de VIH.  

Algunos pacientes desarrollan efectos secundarios, como dolor de cabeza, diarrea o náuseas. También puede tener dificultades para dormir, o entumecimiento o ardor en las manos y pies. Con el uso prolongado puede afectar su grasa corporal y esto puede cambiar su apariencia. Si estos u otros efectos secundarios causan que quiera dejar de tomar este medicamento, por favor hable con su médico o farmacéutico.  

Sin embargo, no deje de tomarlo repentinamente a menos que su médico lo apruebe. En raras ocasiones, es posible que cause efectos secundarios graves, así que llame a su médico de inmediato si nota cualquier cambio inusual en su cuerpo, como fiebre, mareo, color amarillento de la piel u ojos, o cualquier señal de sarpullido. Además, llame si tiene dolor en el costado, o dolor o sangrado al orinar.  

Para reducir los efectos secundarios graves e interacciones, hable con su médico y farmacéutico antes de tomar cualquier medicamento nuevo, incluyendo medicamentos herbáceos.  

Mientras tome Reyataz, debe continuar tomando precauciones para prevenir la propagación de VIH a otras personas.  

Para mejores resultados, continúe tomando Reyataz y planee con tiempo volver a obtener el medicamento antes de que se le acabe ya que dejar de tomar incluso unas cuantas dosis puede empeorar su infección.